El acto de escribir como espacio emancipatorio del alma, donde se encuentran la materia y el espíritu al mismo tiempo. Las letras como el puente entre el espíritu, la mente y el cuerpo.

Mis palabras como un acto emancipatorio, donde mi ser más puro encuentra una voz, cuando frente a ellos y ellas, debo filtrarlo muchas veces.

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Hilvanar para tejer las ideas, los pensamientos; hilvanar para no perder mi cordura; hilvanar para mantener mi esencia frente a los flashes y la superficialidad. Hilvano como un acto revolucionario.

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Estas son mis palabras. Busco que otras y otros encuentren resonancia con lo que paso, lo que siento, lo que vivo.

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Espero que encuentres un alivio en mis palabras, que aunque son mías, quiero que se vuelvan tuyas.

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Hilvana conmigo; no estamos solas, solos.

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Wen